La técnica pomodoro para escribir

Este artículo pertenece al proyecto WriterMuse: creatividad para escritores, que finalizó en septiembre 2018. Encontrarás todos los artículos publicados bajo la etiqueta WriterMuse. Si te preguntas qué fue de WriterMuse, he escrito un artículo para contártelo; en el mismo podrás bajarte, además. todos mis recursos de escritura creativa.

Tu manera de escribir es diferente a la del resto, es la tuya propia, y a veces es sencillamente la mejor para ti y la que más te conviene, pero muchas veces es la mejor porque no conoces una alternativa que se adapte a tus ritmos y a tus necesidades.

 

Puede que seas de los que se organizan las sesiones de escritura para cumplir una cuota determinada: tus 500 o 1000 palabras al día. A veces llegas y rebasas tu cuota en menos de 20 minutos y a veces no llegas ni a la mitad. O, a lo mejor, no tienes ningún objetivo definido y simplemente escribes cuando estás inspirado. Pero, como ya sabes, el que espera desespera. (Sobre la inspiración, te recomiendo el post ¿De dónde saca la inspiración un escritor? de Alexandra en Inteligencia Narrativa.)

 

Si quieres que tu sesión de escritura cumpla con tus objetivos cada día, necesitas un cambio de mentalidad.

Ponte un tiempo que esté a tu alcance. Cúmplelo. Felicítate cada vez. El proceso de escribir cada día es más importante que el número de palabras.

¿Qué es la técnica pomodoro?

técnica pomodoro para escribir

La técnica pomodoro consiste en definir y dedicar un espacio de tiempo determinado a una actividad concreta, sin permitir distracciones ni interrupciones. La técnica estándar recomienda 25 minutos de trabajo y 5 de descanso y una pausa larga de 15 minutos al cabo de cuatro sesiones de trabajo.

 

Durante los 25 minutos (el tiempo habitual de un pomodoro) te dedicas únicamente a escribir, dejas de lado el móvil y cualquier otra distracción, y te concentras en cumplir con esos 25 minutos, sin importar el resultado final.

 

Esto te ayuda a cambiar la manera en que ves el trabajo y tus logros. En lugar de centrarte en el resultado, que puede que no alcances en una sesión, diriges tu atención al proceso: las horas que le has dedicado, cada uno de los pomodoros que has realizado para completar ese trabajo.

¿Para qué sirve el pomodoro?

Utilizando la técnica pomodoro para escribir conseguirás:

 

vencer a tu resistencia inicial (si te dices que solo serán unos minutos, tu sirena no se resistirá tanto como si te propones trabajar «tanto como puedas»)

librarte de las distracciones (si estableces un acuerdo contigo mismo de dedicarte enteramente a una tarea durante un tiempo determinado, puedes decirte que, pasado ese tiempo, atenderás a lo demás)

escribir más en menos tiempo (intentarás aprovechar el poco tiempo que tienes. La urgencia es artificial, pero a la sirena es fácil engañarla y ponerla de tu parte)

¿Por qué funciona?

Estamos acostumbrados a marcarnos objetivos y caminar hacia ellos: «debo terminar este informe», «tengo que pintar este cuarto», «voy a escribir este capítulo». Para tareas de corta duración, la mentalidad orientada a los objetivos es útil, porque la recompensa –lograr lo que te propusiste– es inmediata, pero cuando las cosas se alargan o se complican esta mentalidad no nos ayuda a sentirnos realizados, y sentirse mal haciendo una tarea es funesto para la productividad.

 

En los trabajos creativos, trabajos como la programación, el diseño y, como bien sabes, la escritura, no siempre alcanzamos nuestros objetivos diarios. Y muchas veces se debe a que sobreestimamos la cantidad de trabajo que requieren y nuestra energía disponible. Si en lugar de esperar objetivos cada vez, nos centráramos en el proceso, el trabajo diario, estaríamos satisfechos y trabajaríamos mejor.

 

Por eso el pomodoro resulta tan útil. Es el proceso de redactar el informe, pintar la pared, escribir el capítulo, lo que importa. El o los pomodoros que dediques a esa actividad te hacen sentir realizado igual que si hubieras completado la tarea.

El proceso se puede cuantificar en unidades de tiempo para satisfacer a la parte de ti que quiere lograr un objetivo.

Usar el pomodoro para escribir te ayuda a vencer a la procrastinación.

Es más habitual que procrastinemos cuando no creemos que podamos alcanzar el resultado deseado, al menos no sin invertir largas horas. Si deseas que tu novela esté escrita para dentro de una semana, tu sirena se rebelará y te atrapará, y de repente habrás salido a hacer la compra, sacado a pasear a la iguana y limpiado toda la casa, hasta la parte alta del armario, de la que siempre sale el gato estornudando. En definitiva, no habrás escrito nada.

 

Si eres escritor, es muy probable que te hayas encontrado en situaciones similares en innumerables ocasiones. Existe una resistencia al acto de escribir que nos bloquea, y tiene diversas causas, pero casi todas se resumen en miedo.

 

Lo que mejor se le da a todos los escritores es encontrar maneras de evitar escribir. Alan Dean Foster

Pero tengo buenas noticias para ti. Esa resistencia se puede vencer si cambias tu mentalidad y transformas tus objetivos.

 

En lugar de «Voy a escribir 1000 palabras» o «Voy a escribir algo bueno en este rato que tengo» o incluso «No sé si lo que voy a escribir será bueno», repítete lo siguiente:

 

técnica pomodoro para escribir

Esto es lo que hace Abel de Cómo escribir un libro. Cuando la escritura no fluye para él utiliza un pomodoro para mantener el hábito de escribir.

¿En qué puedes emplear la técnica pomodoro?

En el trabajo

Esta herramienta se puede utilizar en muchos ámbitos, tanto en tu trabajo habitual como en casa, para hacer las tareas domésticas, estudiar, completar un informe, hacer ejercicio físico… En cada una de estas áreas funciona de una manera diferente.

 

Por ejemplo, en el trabajo, sobre todo en los trabajos que requieran una concentración estable durante largo tiempo, es habitual utilizar pomodoros más largos (40 minutos o una hora) para poder aprovechar la inercia que llevas después de haber llegado a tu zona de máxima concentración (o «la zona»), pasados los primeros veinte minutos.

 

En el trabajo el pomodoro es más probable que te ayude a respetar los descansos que a ponerte a trabajar. Establecer un tiempo de 50 minutos a realizar tu trabajo no te genera resistencia y te recuerda que debes levantarte de la silla y prestar atención a tu cuerpo de vez en cuando.

 

Un truco que te ayudará a escribir más desde tu trabajo

La técnica pomodoro no solo sirve para motivarte («¡Solo cinco minutos más y entro al Facebook!») o para recordarte que tomes un respiro tras largas sesiones de trabajo. Los cinco minutos de descanso entre pomodoro y pomodoro pueden ayudarte a planificar tu novela.

 

De esos cinco minutos, emplea el primero en coger una idea de tu lista (esa lista que te sugerí crear en el post Aprovecha cada minuto), y el resto en meditar sobre ella o visualizarla tranquilamente mientras descansas sentado en tu silla o, mejor aún, levantado y estirándote un poco.

Mientras escribes

Para escribir las necesidades son similares, pero la Resistencia es, muchas veces, más poderosa. Hacer tu trabajo cada día en la oficina no te genera tanta ansiedad: te sientas y te pones a ello. Con la escritura muchas veces lo más difícil es ponerse a ello.

 

En la escritura, el pomodoro te ayuda a vencer la resistencia inicial de ponerse a escribir. Sobre todo si te has enfocado demasiado en el resultado y este no ha sido como esperabas, es normal que te cueste un poco decidirte a escribir. Si eres una de esas afortunadas personas que se pone objetivos razonables y los cumple con frecuencia (y, cuando no los cumple, no se fustiga por ello), entonces tal vez no necesites cambiar tu foco. (Pero te recomiendo que lo pruebes igualmente. Retarte y sacudir tus rutinas es lo mejor para flexibilizar tu intelecto.)

 

Si la idea de llegar a las mil palabras te da vértigo (a mí me lo da), te ayudará pensar en el proceso en lugar del resultado. El resultado llega por sí solo cuando escribes sin presiones.

El pomodoro te ayuda a cambiar tu foco de resultado a proceso.

La técnica pomodoro para escribir

Ahora sí, específicamente para escribir, esto es lo que necesitas para sacarle el máximo provecho a tu pomodoro:

 

Elimina distracciones. (Móvil, internet, el reloj de la cocina si hace mucho ruido) y si hay alguien más a tu alrededor, dile lo que vas a hacer y que no te interrumpa durante ese tiempo.

Tanto si has seguido después del pomodoro como si no, ¡felicítate! Has logrado tu objetivo del día. Todo lo extra es extra; no le des mucha importancia.

Ponte 15, 20 o 25 minutos de tiempo «mínimo», según sientas que eres capaz.

Mejor empezar con poco, pero te recomiendo que, al menos, te des 20 minutos. A partir de los 20 minutos de trabajo ininterrumpido, tu concentración se incrementa. Tu escritura tenderá a mejorar hacia el final de tu pomodoro.

Cuando suene la alarma, decide si sigues o no escribiendo. Tu objetivo ya está cumplido, pero si estás en la cresta de la ola, quizá puedas aprovechar los próximos diez o veinte minutos.

¿Cómo utilizo esta el pomodoro? La parte técnica

La técnica pomodoro es muy conocida y vas a encontrar montones de aplicaciones móvil, además de las alternativas menos tecnológicas. Aquí tienes un resumen de tus opciones:

 

alarma técnica pomodoro para escribir

Alarma: del móvil o del despertador. Fácil de usar y sencilla, aunque si utilizas el mismo tono que el de levantarte, estarás alimentando tu odio y acabarás pasándote al lado oscuro.

temporizador técnica pomodoro para escribir

Temporizador de cocina: el tomatito que programas con el tiempo que va a estar el horno en marcha para que no se te queme la pizza. Probablemente lo viste en casa de tus padres, tal vez con forma de huevo o de Estrella de la Muerte de Star Wars. El inconveniente principal es que no dejan de sonar con un tac-tac-tac-tac-tac muy insistente.

aplicación técnica pomodoro para escribir

Aplicaciones móvil o web: mi preferida es PomoDoneApp, para el ordenador de escritorio (Mac, Windows o Linux), para Android o desde la web: es muy completa, se sincroniza con todo y tiene mil funciones, hasta automatizar los inicios de sesión; pero si quieres algo sencillo para empezar y probarlo, te recomiendo TomatoTimer, una aplicación web muy simple que no requiere ni registro ni descarga.

Algunos peros

Hay muchos detractores de la técnica pomodoro como método de productividad en el trabajo, y sus argumentos tienen mucho sentido: los 25 minutos que habitualmente se recomiendan para un pomodoro no tienen en cuenta que normalmente llegamos a la zona de máxima concentración, de flow, pasados los primeros 20 minutos.

 

Yo misma he podido comprobarlo: escribiendo este post. Los primeros 20 minutos han sido un caos. Las ideas saltaban de un lado a otro, sin orden ni conexión lógica, y yo sentía que estaba en bucle diciendo una tontería tras otra… Pero pasados los 20 minutos encontré algo a lo que aferrarme y empecé a organizar mi discurso mejor. Solo quedaban cinco minutos, ¿qué hacer? ¿Parar porque el pomodoro me lo indica?

 

Si te pasa, tienes dos alternativas: puedes ignorar el pomodoro (lo que hice y hago muchas veces), o puedes establecer una sesión más larga, que se adecúe a ese tiempo que tarda la inspiración en fluir naturalmente. La primera tiene el inconveniente de que el pomodoro va a sonar igualmente y te va a interrumpir (salvo que lo hayas configurado para que no suene o suene muy bajito). La segunda tiene el inconveniente de que no sirve para engañar a tu cerebro para que te deje trabajar solo unos minutos.

 

Para escribir, la mejor solución que he encontrado es poner un pomodoro modesto (20 o 25 minutos) y, si sientes que llegas a la zona de máxima concentración, seguir adelante e ignorar la pequeña interrupción de la alarma.

¿Eres de los que se guía por procesos o por objetivos? ¿Has utilizado alguna vez el pomodoro para escribir? ¡Cuéntame!

 
Feliz día haciendo lo que te gusta. 🙂

 

4 Comments on “La técnica pomodoro para escribir”

  1. Pingback: El estado de flow en la escritura | WriterMuse

  2. Pingback: Qué es y cómo vencer a la Resistencia a escribir | WriterMuse

  3. Este es, de lejos, el articulo en español más completo sobre la técnica pomodoro. Además de esta técnica, para estudiar en solitario, es necesario hacer una desconexión digital completa.

    1. Hola, José! Gracias por tus palabras. 🙂 Totalmente de acuerdo en lo de desconexión digital; por eso prefiero utilizar aplicaciones de escritorio de Pomodoro en lugar del móvil, o al menos ponerlo en modo avión si voy a trabajar.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *